¿Por qué no debemos conducir con los neumáticos desgastados en verano?
Un aspecto que no debemos descuidar cuando salimos con el coche de vacaciones es la presión de los neumáticos. Hoy en Tu Rueda, os explicamos por qué es peligroso conducir en verano con los neumáticos desgastados.
Es posible que no seamos conscientes de lo peligroso que puede llegar a ser conducir durante el verano con los neumáticos gastados, pero lo cierto es que es algo que debemos evitar. Para ello es imprescindible comprobar la banda de rodadura antes de comenzar con el viaje, de esta manera tendremos un viaje mucho más cómodo y más seguro.
Durante los meses de verano los vehículos suelen recorrer distancias mucho más largas y las carreteras están muy congestionadas. Para que el coche se adhiera bien a la carretera es importante fijarnos en el dibujo de la rueda, la goma y la banda de rodadura. Estas tres premisas se tienen muy controladas en invierno ya que los conductores toman más precauciones por las complicaciones climatológicas, pero en verano parece ser que nos olvidamos un poco de ellas y emprendemos viajes largos sin revisar los neumáticos.
Como ya hemos comentado en otras ocasiones los neumáticos son la única conexión que existe entre el vehículo y el asfalto, por lo tanto es fundamental para la seguridad. Pero ¿por qué es peligroso conducir en verano con los neumáticos desgastados? En Tu Rueda os damos estas 6 razones.
- Cuando realizamos viajes de larga distancia los neumáticos exigen un esfuerzo mucho mayor. Si están en buenas condiciones será más complicado que sufran pinchazos u otras averías.
- En España, debido a las altas temperaturas que sufrimos durante el verano, es asfalto alcanza hasta 10 grados más de temperatura, por lo que las gomas de los neumáticos (que es lo que incide directamente sobre el asfalto) debe estar en buenas condiciones.
- Cuando la carretera está muy congestionada es posible que tengamos que pegar frenazos bruscos y necesitamos que los neumáticos se adhieran bien a la carretera. Si la banda de rodadura está en malas condiciones veremos cómo pierde adherencia.
- No debemos descartar la posibilidad de ser sorprendidos por una tormenta de verano, y nuestros neumáticos también deben estar preparados para soportar este tipo de inclemencias. Si la presión no es la adecuada o el dibujo está demasiado gastado podemos llegar a sufrir el temido aquaplaning.
- Si nos fijamos en el aspecto económico, los neumáticos en malas condiciones gastan más combustible.
- Y también mirando el aspecto económico os recordamos que si la banda de rodadura de vuestros neumáticos es inferior a 1,6 mm la multa puede llegar a ascender hasta los 200 euros por neumático. Si el desgaste es demasiado grande es posible que incluso retiren el vehículo de la circulación.
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